Hace poco, y con mucho escepticismo, fui a ver "transformers 4: Age of extinction", muy a pesar que la primera parte me pareció malvada, la segunda pésima, y la tercera que aún no he visto y supongo no voy a ver, más que nada porque el titulo "dark side of the moon" me resultó una falta de respeto por obvias razones musicales. Conociendo estos antecedentes, decidí, tomar el riesgo, e ir a verla. En realidad, no llevaba una gran expectativa, pues el trabajo de Michael Bay es desde mi punto de vista, insoportablemente Estadounidense. No hay que ser un genio para entender que los lugares comunes son firma indudable en sus producciones. Es así, como los atardeceres de mil colores, únicos en el cielo gringo, la oda al heroísmo que solo en Estados Unidos tiene cabida, explosiones a diestra y siniestra, la muerte de un personaje que al final nadie recuerda y que no tiene ninguna repercusión en la historia, y cientos y cientos de edificios, parques, carros, aviones, calles, y ciudades destruidas sin razón, son indudablemente, ingredientes en las películas de Bay.Teniendo en cuenta estas premisas, no me encontré con nada diferente a lo que ya se sabía de antemano, sin contar la copia de un Steve Jobs "visionario" e "innovador" que descifro el genoma del robot (¿quién más si no un ciudadano gringo?) el humor muy de hillbilly en Texas, la rubia "linda" que dice tener 17 pero parece de 26 y finalmente el uso de unos villanos planos y nada tiranos. Sin embargo, puede ver con sorpresa, un exagerado y hasta saturado uso del product placement, que si bien, es usado por este director (ganador en algún momento el premio a whore director por esto mismo) en esta película, mostró que se puede llegar a un nivel insultante.

El product placement no es más que el uso de marcas en escenas específicas de películas. No se tiene que referir directamente a la marca o ser explicito para comunicar. Teóricamente, se usa para evitar esa publicidad intrusiva, que tanto molesta a algunos. A veces, solo hace falta mostrar algún rasgo distintivo, una letra, un color, un símbolo para que la mente de nosotros, los espectadores-consumidores haga el resto. Entonces, por ejemplo, durante una escena de volver al futuro, Marty Mc Fly hace una referencia a pepsi, nike, mattel, texaco o de-lorean.


Sin embargo, el uso del product placement en "transformers 4" llego a niveles tan altos, que ni siquiera el mismísimo Steven Spielberg jamás podrá superar. Beats, oakley, Miller, Vitorias secret, vogue, polo ralph lauren, GM, entre muchas otras más. Son apenas, una muestra del fetiche que Michael Bay siente por el "emplazamiento publicitario".


Es sabido, que películas como la Isla (2006) y Transformers (2008) dirigidas por este director, rompieron records cada una, por el uso excesivo del product placement. Por ejemplo y para comprender el por qué de tantas marcas en las películas de este señor. General Motors pago 6 millones de dólares a los productores de Transformers para que cada una de sus marcas fuera exclusiva en sus películas, entonces, por eso, ya no vemos a bumblebee como un wolsvagen beetle, al contrario, lo vemos como un flamante Chevrolet camaro. Aun así, las marcas insignia de los estados Unidos ya no son las únicas, un nuevo invitado más fuerte y con mucho más dinero para invertir está haciendo cada vez más presencia en el celuloide, el cual, está muy dispuesto a pagar millonadas de dólares para sobresalir y se trata de la poderosa China.


Para nadie es un secreto, que China es hoy por hoy, uno de los mercados más importantes para el mundo de Hollywood, es el segundo país consumidor de las películas gringas. Ya no es extraño ver entonces, que muchas de las premieres se realicen en Beijing o en Shangai, se gravan escenas en el gigante rojo, y se le da más y más importancia. ¿Por qué? la respuesta es tan fácil y obvia, que ni el mismo Confucio podría formularla mejor, y es el dinero, o como dicen los AC DC, money talks, y cuando el dinero habla, el mundo escucha atentamente o en este caso, Michael bay y sus secuaces.


Los chinos invirtieron grandes sumas de dinero por ver sus marcas "incrustadas" en las escenas de la película, el hotel cinco estrellas Pangu Plaza pago 1,6 millones de dólares. El hotel se vio, pero solo por unos pocos segundos. El área turística de Wulong al sur de China y considerada por la UNESCO como herencia de la humanidad, y representada por la empresa de turismo "Chongging Wulong Karts Park" también pago dinero por aparecer en la película, entrego la misma suma que el hotel, y de igual manera, su aparición en la película fue muy breve, sumando a esto el disgusto por no mostrarse el logo de la compañía durante la escena. La empresa Black Duck, cuya especialidad no es otra que empacar carnes, vio cómo su marca tampoco vio justificada la suma de dinero que se pagó por aparecer en la franquicia, pues no fueron suficientes los tres segundos que se vio la marca en una nevera. Lamentablemente para Bay, estas insatisfacciones, hacen muy probable, que los acuerdos entre Hollywood y China se vean afectados en el futuro.

Muy a pesar de los problemas generados en esta película de robots con empresarios chinos, el vinculo esta decididamente cerrado y este "fenómeno" seguirá por lo alto. La lluvia de marcas entonces dejara de ser exclusivamente Estadounidense, las marcas chinas ahora tendrán mas representación en las producciones de Hollywood mientras sean hechas en conjunto con China. La relación del product placement y las películas, va a seguir adelante, es un ingrediente que cada vez, mas cineastas del país del norte van a preferir, sin importar que tan grotesca e insensata pueda llegar a ser.


Como espectador y publicista, realmente disfrute del product placement en peliculas como Castaway, con wilson y toda la personificación que se le dio a esta pelota. Pero odie, como en transformes, los logos de un montón de productos gringos y chinos fueron el centro de la cinta, porque en vez de ser una película, parece un gran comercial hecho para y por marcas.


Bonus track:

Por si aún queda alguna duda respecto al product placemente y lo que se maneja de fondo y en torno a él, es necesario entonces darle un vistazo al documental "the greatest movie ever sold" este es el mejor ejemplo de como por medio de publicidad y mención de las marcas, estas son capaces de pagar por toda la producción y realización de una película sin sacar un peso de uno de nuestros bolsillos.